Tras abandonar la prisión de Rikers Island (Nueva York) en la que estuvo cumpliendo una condena de ocho meses por posesión de armas, el rapero Lil Wayne, nacido como Dwayne Michael Carter, se ha convertido en un fiel seguidor de los Miami Heat. No cabe duda de que su poder adquisitivo a pesar de su condición de ex recluso le permitirá adquirir un abono de pista en el American Airlines Arena. ¿Será el próximo Jack Nicholson? ¿Quizá el próximo Spike Lee?
No hay comentarios:
Publicar un comentario