Al comienzo de la temporada muchos pudieron pensar, con cierta lógica dado su ego, que la figura de Gilbert Arenas podría eclipsar la magia de un jugador que acababa de irrumpir en la liga nada menos que como número uno del draft. Con 19 años, cumplió 20 el pasado 6 de septiembre, se presentó en la liga de verano con un desparpajo que hizo saltar todas las alarmas a las expertas voces que se apuraban en atisbar a una estrella en potencia. Tras dominar en su época de intstituo (ver vídeo) y con sólo un año de experiencia universitaria con la Universidad de Kentucky en la que sus 16.6 puntos, 4.3 rebotes y 6.5 asistencias le valieron algún que otro reconocimiento ('Freshman' de la NCAA 2010 entre otros).Tras un inicio de temporada realmente espectacular la pasada madrugada consiguió su primer triple-doble de su corta carrera, seis partidos hasta la fecha, como profesional. 19 puntos, 13 asistencias y 10 rebotes para ganar a los Rockets por 98-91 en lo que es la segunda victoria en seis partidos de la franquicia capitalina. Lógico que haya desbancado a un cada vez más desmitificado por mi parte Gilbert Arenas. Gilbertology tras sus 18 y 13 puntos en sendas derrotas frente a Knicks y Cavs, se quedó en 5 puntos en 23 minutos en su tercer partido tras reconocer que su baja ficticia de un encuentro de pretemporada fue fruto del 'acongojamiento' que le poroducía el público de Verizon Center.
Y encima ya ha venido con la lección aprendida de que la NBA es puro espectáculo, ¿Qué más se puede pedir?
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